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¿Podemos ser
perfectos en nuestra vida cristiana?
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Es una pregunta
que se hacen muchos cristianos hoy en día; sobre todo cuando se trata de
igualar la perfección de la que habla la Biblia con la que conocemos en nuestro
lenguaje contemporáneo (perfeccionista), la perfección de la que hablan las
Escrituras tiene que ver con santidad y pureza, con el carácter que Dios da a
sus hijos mediante Jesucristo.
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La mayoría de las controversias que rodean la
perfección, vienen del hecho de que la doctrina es interpretada a la luz de la
debilidad del hombre más bien que en la fortaleza de Dios. Esta perfección,
como fue declarada por Jesús, es tanto el deber como el privilegio del hombre.
La palabra hablada no solo es un mandato, sino también una promesa. Dios no
ordena algo que es imposible. A pesar de cuan contaminado puede llegar a ser el
hombre por el pecado, la gracia de Dios, como fue manifestada en Jesucristo, es
suficiente para currarlo y purificarlo.
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“Sed perfectos como vuestro Padre que está en los cielos es
perfecto”, (Mateo 5:48)
I.
Definición
a. La
perfección, como la Biblia usa el término, es práctica.
b. Algo
es perfecto si ello “realiza plenamente
el propósito para el cual fue planeado, diseñado y hecho”.
c. Gr. Teleios. Completo (en varias aplicaciones de trabajo, crecimiento,
mentalmente y carácter moralmente, etc). Teleios, el adjetivo de telos lleva
consigo la idea de algo que ha alcanzado su fin, termino o limite. De aquí se
derivan los vocablos completo, perfecto, pleno, que no necesita nada, con
referencia especial al fin para el cual fue creado. cualidad de completo:-
alcanzar madurez, completo, maduro, perfecto.
d. El
término “perfecto” es usado en la Biblia (Mateo 5:48; 19:21, Romanos 12:2;
Efesios 4:13; Filipenses 3:15; Colosenses 1:28; 4:12;
e. Cuando
Jesús ordeno: “Sed pues vosotros perfectos”, la
declaración lleva consigo por vía de la misma definición de teleios, la idea de
que al final este estado será alcanzado.
f. Los
cristianos serán perfeccionados cuando ellos cumplan el propósito para el cual
fueron creados y enviados cuando ellos cumplan el propósito para el cual fueron
creados y enviados al mundo.
g. El
escritor de Hebreos nos confiere un conocimiento más claro del concepto de la
perfección. En Hebreos 5:13 y 14, él dice: “Que
cualquiera que participa de la leche, es inhábil para la palabra de la
justicia, porque es niño; Mas la vianda firme es para los perfectos, para los
que por la costumbre tienen los sentidos ejercicios en el discernimiento del
bien y del mal”.
i.
Niño” viene de la palabra griega Nepios significa un infante, un niñito,
un menor de edad. La idea básica de inmadurez está en el término nepios por
definición. El escritor de Hebreos define el termino nepios (un bebe) como uno
que es “.. inhábil para la palabra de la justicia…”. (Hebreos 5:13)
ii.
La palabra “perfectos”, por el contrario, viene
de la palabra griega teleios. En esencia, cuando teleios es usada en conexión
con un cristiano, está describiéndolo como uno que ya alcanzo la edad madura en
el sentido espiritual, o la madurez espiritual requerida.
h. En
esta luz se puede decir que la perfección de los santos simplemente significa
que los santos han alcanzado la madurez en espiritualidad. No obstante, se
deberá ejercer mucha precaución para no caer en la trampa del liberalismo. El
criterio de la perfección de los santos no radica en las debilidades del
hombre, sino en la potencia de Dios. El ser espiritualmente maduro es vivir en
la esfera en la cual el Amor Divino efectúa Su perfecta obra.
i.
A fin de que un cristiano este espiritualmente
maduro, significa haber llegado al lugar donde se tuvo la intención de que el
llegara desde el principio.
II.
A IMAGEN Y SEMEJANZA
a. El
hombre fue creado para ser semejante a Dios. El relato de Génesis manifiesta:
“Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza…”. (Génesis 1:26)
b. Heb.
Imagen: selem, «estatua; imagen: copia». El vocablo significa «estatua. Demút: parecido, semejanza; concretamente modelo,
forma. Los creo con reflejos de algunas de sus propias perfecciones en
conocimiento, justicia y santidad, así como autoridad (dominio) sobre sus
propias criaturas.
a. El
ser justo, integro, al estar en el lugar donde nada nos falta, es ser a imagen
y semejanza de Dios. Dios es santo en Su infinita naturaleza. Su santidad no
permite la existencia del pecado.
b. El
hombre peco.
c. Pero
el poder santificador de la sangre derramada de Jesús, es suficiente para
levantar al hombre del pecado y proveer los medios a través de los cuales el
pueda permanecer dentro de esas corrientes purificadoras.
d. Interpretando
las Escrituras desde el punto de vista de las debilidades del hombre, la
perfección de los santos parece una imposibilidad. Visualizando las Escrituras
desde la ventajosa posición de la obra perfecta de Dios, la perfección de los
santos no solo es una realidad, sino que es el privilegio del hombre para
llegar a ser semejante a Dios a través de Jesucristo. Por medio de la gracia de
Dios, el alcance de la perfección cristiana es claramente expuesta en los
Escritos Sagrados.
III.
EL ESTADO IDEAL DE LA IGLESIA
a. Efesios 4-11-18
b. El
hecho de alcanzar la medida de la edad de la plenitud de Cristo, es llegar a
ese glorioso estado de la perfección.
c. El
lograr llegar a la perfección es ser un cristiano maduro, consiguiendo la
plenitud de la perfección hallada en Cristo.
d. El
no conoció pecado y a través de Él es posible para el hombre el vivir sin
pecado. La misma definición de perfección conlleva de por si la seguridad de
que la obra está concluida (acabada, perfeccionada).
e. El
mandamiento de Jesús fue: “sed pues vosotros perfectos”.
El mandato de Dios, pues que es imposible el que Dios pueda mentir, es también
una promesa. La promesa por la inmutabilidad de Dios vendrá a ser una realidad,
ya que la Iglesia será presentada a Cristo: “Una
iglesia gloriosa sin mancha ni arruga, ni cosa semejante; sino que fíese santa
y sin mancha”. (Efesios 5:27)
f. La
Iglesia será presentada a Jesucristo como un Iglesia radiante sin mancha,
arruga o sin algún otro defecto. La Iglesia llegara a ser santa y sin tacha.
Según las Escrituras, no hay lugar para el pecado en la Iglesia triunfante.
g. Hoy
la Iglesia puede existir en su estado de imperfección, pero será purificada de
toda injusticia.
h. Los
miembros de esta que actualmente no estén viviendo vidas santas, tarde o
temprano llegaran a ser santos o serán expulsados del Cuerpo de Cristo, ya que
la Iglesia alcanzara el estado de la perfección antes de que Cristo se la
presente A Si Mismo, una Iglesia gloriosa y triunfante.
IV.
PROPÓSITOS DE LA
PERFECCIÓN DE LOS SANTOS
a. Efe
4:12 a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la
edificación del cuerpo de Cristo,
b. Efe
4:13 hasta que todos lleguemos a la
unidad de la fe
i.
y del conocimiento del Hijo de Dios,
ii.
a un varón perfecto,
iii.
a la medida de la estatura de la plenitud de
Cristo;
1.
Estarura: Gr. jelikía: madurez (en años o
tamaño):- edad, estatura.
Conclusión:
Dios desea un pueblo perfecto, sin mancha ni arruga, para
que cuando Jesús venga por su Iglesia la encuentre en Santidad. Oremos porque
el Espíritu Santo purifique nuestros corazones, por vivir apartados para El,
pues sin santidad nadie vera al Padre. Cristo ya lo hizo, solo tenemos que
creerlo; vivamos como quienes se han propuesto alcanzar la meta que es Cristo,
el Santo, santo, santo.
PERFECCION DEBE SER UNA META:
HEB. 6.1
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